Corre, corre, pez

Corre, corre, pez,
detrás está mamita
haciéndote cosquillas
con los bigotes
en los pies.

Sí. Horrible. Yo opino lo mismo. Es de Romeo. Me provoca dolor de cabeza. Pero a ella parece que le gusta. Sabe cómo engatusarla, cómo llegar a la parte de Vera que aún es niña. En fin. Está decidido. Le haré cosquillas. Seré un pez. Uno alargado, de dos metros, con dientes cortantes, de los que viven en aguas tropicales.