Quieres (c)

¿Quieres?, ofrecí. Ese truco ya lo he visto. ¿Qué truco? Enseñar algo que me gusta para que me acerque. Creo que te equivocas, los buenos invitan. Y los malos también, y luego quieren otras cosas. Tienes que comer, repliqué. Aún me sigo preguntando por qué tuve ese arrebato de compasión. Dejé en el suelo la lata de piña que había cogido de un supermercado. La señalé con una mano y esperé. El niño caminó, se agachó, la cogió del suelo y retrocedió sin dejar de mirarme. Luego se sentó y empezó a masticar piña. Despacio, sugerí. Pero el niño siguió comiendo como si se hubiera olvidado de hacerlo y quisiera aprenderlo todo al mismo tiempo, masticar y tragar.