La calzada (d)

La calzada estaba cortada por cuatro coches volcados que formaban una barrera. A ambos lados de la misma yacían los restos desperdigados de varios cuerpos. Manos, dedos sueltos, piernas cercenadas, conductos membranosos flácidos, descosidos como morcillas. El niño rodeó el obstáculo sin inmutarse, como si esa escenografía existiera desde siempre y estuviera aburrido de ver muchas parecidas.