La chica (XI)

La chica subió al tejado. Desde allí lo vio todo. Cómo ardían cuerpos. Cómo se desparramaban sobre el césped y la tierra. Cómo se confundían. Zombis descabezados por proyectiles y humanos descabezados por brazos zombis. Los soldados disparaban sin poner antes los ojos en las mirillas que distinguían a unos de otros. Lo que más tarde dijeron los noticiarios fue que unos terroristas habían tomado un instituto de secundaria, y que estaban locos, y que asesinaron a todos los rehenes, y que los soldados no pudieron hacer más. La chica, desde aquella altura, no pudo contar su versión.