El planeta estalló

El planeta estalló. Era un globo terráqueo de cristal que colgaba del techo, en mitad de la pista de baile. Muchos humanos sufrieron cortes en la cara y en los brazos. Alguno se clavó un pequeño trozo del planeta en los ojos. Eran jóvenes y se sentían libres y retorcían las palabras retorcidas por los nuevos tiempos: matadero no era matadero, era abastoganado, pero para ellos tampoco era abastoganado, era mataydesuella, y emplazaban aquel nuevo sitio en cualquier parte, como por ejemplo, una discoteca. Como eran libres y zombis y les daba lo mismo escupir que morir y matar que reírse en tu cara, atrancaron las puertas, volaron el fanal de cristal y se volvieron locos allí dentro. Eran salvajes y retorcían las palabras retorcidas, pero el nuevo orden zombi les dio una tercera vuelta: la noticia fue que otra sala de fiestas se había incendiado por deficientes medidas de seguridad.